La mala educación, muy mala educación extremeña

El pasado día 26 de octubre aparecían en distintos medios de comunicación extremeños las declaraciones de la … Consejera de Educación, Eva Mª Pérez, destacando los grandes logros conseguidos en la normalización e inclusión educativa de niños con determinadas discapacidades, aseverando que, “lo que queda por conseguir para lograr la plena normalización e integración del alumnado con discapacidad "no es problema de recursos", sino que debe ser "un objetivo compartido por toda la sociedad".

http://www.europapress.es/extremadura/noticia-eva-perez-destaca-ultimos-anos-conseguido-mucho-integracion-alumnos-discapacidad-20101026171722.html

Leo la noticia del pasado día 29 de enero de 2011, donde determinados padres han dejado de llevar a sus hijos, afectados por autismo, al negarse a granjerizar en colegios de educación especial a sus vástagos, incidiendo en la mala distribución e insuficiencia de medios y recursos educativos extremeños para atender con la debida sensatez a estos niños.
http://www.lacronicabadajoz.com/noticias/noticia.asp?pkid=63803
¿En qué quedamos … Consejera de Educación?, ¿no dice usted que no es problema de recursos, sino que debe ser un objetivo compartido por toda la sociedad? ¿Por qué entonces intenta relegar a la segregación granjerizada a esos niños, cuando incluso APNABA, Asociación de Padres de Niños con Autismo de Badajoz, entiende improcedente para el desarrollo e inclusión de estos niños que estos sean apartados de los colegios donde venían estando matriculados y conviviendo con otros niños, como parte fundamental de esa normalización e inclusión efectivas. ¿A qué juega? ¿Quién le aconseja de modo tan chapucero? ¿o es usted quien unilateralmente dictamina las necesidades y segregacionismo de estos niños?¿No explicaba que los recursos no eran el problema?

Para rematar la faena y cual Torquemada inquisidor, como siempre haciendo gala de una estupidez y hediondez ética y humana cercana al surrealismo de Kafka, determinados altos cargos, avalados por la inspección político policial  del régimen imperante por estos lares, infunde temor a estas familias con el chantaje y arma emocional de excomulgarlos con la puesta en marcha del protocolo sobre absentismo escolar. Sin duda alguna, confieso mi vergüenza ajena por ser extremeño y tener que enrojecerme ante quienes infunden terror de pistoleros, a la vieja usanza del lejano oeste, de Torquemadas adoctrinados y de vulgares extorsionistas de los ciudadanos, que no sabiendo ni cumplir con las más elementales herramientas para que se verifiquen unos apoyos concretos hacia un alumnado muy desfavorecido y viéndose incapaces e incapacitados para protegerlos, atacan, mediante el miedo de la negligencia y sentirse desnudos de recursos éticos y humanos para paliar lo que nuestra Carta Magna, los Derechos de la Convención de la ONU suscritos por España, la L.O.E. , el sentido común y la honradez humana señalan, discriminando muy negativamente a estos menores en franca desventaja, pero por supuesto, Mamá Educación Extremeña en este caso, sigue aquel dicho de “haz lo que yo diga pero no lo que yo haga”.
http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/noticia.asp?pkid=558347&page=3#EnlaceComentarios

Mala educación, muy mala educación extremeña … Consejera Pérez. Por cierto, ¿a qué esperan para volver a abrirme falsamente expediente por posible desprotección hacia mis hijos y a renovar nuevamente el famoso protocolo de absentismo escolar, puesto que mi hija lleva a día de hoy y tras un brevísimo paréntesis de amago de inclusión 48 días sin asistir a clase? ¿o el acoso consentido, complaciente y cómplice del Sistema Educativo incomoda a propios y extraños?
Como le digo … Consejera del ramo, mala educación, en este caso, muy mala educación extremeña.
Nota: Para interpretar los puntos suspensivos (…) les invito a repasar el artículo
PROPAGANDA GOEBBELIANA DE LA JUNTA DE EXTREMADURA II: EL SISTEMA EDUCATIVO



AUTISTAS DE PRIMERA Y DE SEGUNDA

LOS PROBLEMAS DE ESCOLARIZACION DE MENORES CON ENFERMEDAD NEUROLOGICA.

Insuficientes y mal distribuidos: así ven los padres los recursos públicos educativos de la región para atender a sus hijos autistas Rechazan llevar a los niños a colegios de educación especial.

29/01/2011 A. FERNANDEZ

Un referente Niños, familiares y trabajadores de Apnaba, en la celebración del vigésimo aniversario
Foto:SANTI GARCIA

Elena, Lucía y Martín, los tres niños con autismo o síndrome de Rett cuyos padres se niegan a escolarizarlos en el Centro de Educación Especial PROA de Cáceres --como dictamina la Junta-- tampoco fueron ayer a clase. Sus familias exigen poder educarlos, como han hecho en los últimos años, en un colegio convencional con los profesionales y espacios oportunos. Y creen que, si en lugar de vivir en Cáceres y Malpartida de Cáceres lo hiciesen en otra localidad, "tal vez no hubiese habido problemas; en Badajoz hay muchos más recursos", coinciden Ana Salas, Sabina Plata y María García, madres de Elena, Lucía y Martín, respectivamente.
La comunidad autónoma se ha dotado en los últimos años de una serie de medios para afrontar la educación de alumnos que sufren este tipo de enfermedades neurológicas. La Consejería de Educación ofrece en toda la región cinco aulas estables, donde los niños reciben atención individualizada y especializada; siete aulas específicas para casos de autismo, todas concertadas con centros privados; y 19 centros de educación especial para menores con discapacidades graves que no pueden asistir a colegios ordinarios.
El problema, según denuncian los padres cacereños, no es solo que estos recursos son "insuficientes"; también "están mal repartidos". Se apoyan en que hay tres aulas estables en la provincia de Badajoz (dos en la capital y una en Zafra) y dos en Cáceres (una en la capital y otra en Plasencia, más un aula sustitutoria en el colegio Caesa Caecilia para casos específicos); y las siete aulas concertadas para autismo están todas en la ciudad pacense (en el centro que abrió la Asociación de Padres de Niños Autistas de Badajoz --Apnaba--, una institución de referencia a nivel nacional). Además, de los 19 colegios de educación especial, solo tres se encuentran en la provincia cacereña.
Pero no es solo un problema de distribución. La Junta ha matriculado a Elena, Lucía y Martín en el Centro PROA al haber superado los 6 años de edad y terminado la educación Infantil. Lo ha hecho sin el consentimiento de los padres, que piden que sus hijos sigan escolarizados en aulas estables de colegios ordinarios, convencidos de que éstos mejoran el desarrollo y la integración de los niños. "PROA no está preparado ni equipado para sus necesidades; sería aislarlos, no socializarlos", reiteran las familias. Y comparten esta visión en Apnaba, que también urge a Educación a ampliar el número de aulas estables. "Son niños con una discapacidad muy específica. Una mala integración puede hacer mucho daño al desarrollo del menor y a sus familias", subraya Concha Gallego, presidenta de la asociación. Ella tampoco llevaría a su hijo, autista, a PROA u otro centro de educación especial. "Apoyamos a esos padres de Cáceres. Defendemos una atención especializada".
En Apnaba esperan que la Junta termine apostando por una educación basada en la integración de estos niños, "aunque de momento no quieren concertar más aulas con nosotros", explica Concha Gallego, que apunta otro problema: "crecen y hay que darles una respuesta adecuada". Hoy los niños extremeños con autismo o enfermedades similares cuentan con las aulas estables y las concertadas para la enseñanza Infantil y Primaria --en Cáceres solo las primeras y hasta Infantil--. "A partir de ahí --explica--, por la vía pública solo están los centros especiales. Y cuando cumplen 16 o 17 años se acaba la oferta educativa. No hay continuidad".
Fuente: http://www.lacronicabadajoz.com/noticias/noticia.asp?pkid=63803#EnlaceComentarios