ACOSO ESCOLAR E INSTITUCIONAL EN EXTREMADURA: INDICADORES DE NUESTRA CLASE POLÍTICA (V): RESULTADOS DEFINITIVOS

Como ha venido aconteciendo a escala local y autonómica, los resultados a nivel nacional; tras mi intento desesperado como padre para que algún, cuentan, “representante político” pudiera tener una mínima sensibilidad para apoyar y exigir soluciones y responsabilidades hacia una niña con serios problemas socioeducativos y sometida a un sistemático rechazo, discriminación, aislamiento y bullying; fueron similares a los obtenidos por los anteriores, es decir total despreocupación, banalidad, ninguneo, apatía y mucho, mucho desprecio por esa lamentable y vil dejadez e indiferencia hacia esa niña que ayer, una vez más, tuvo uno de esos días de llanto y desconsuelo por comprobar y decirme que no tiene amistades y que la vida, en su caso es muy dura y triste, tras casualmente cruzarnos, camino a casa, con una de sus antiguas hostigadoras, acompañada por una “pseudoamiga” rumana, que finalmente no buscaba la amistad de mi hija, sino pertenencias, regalos e incluso alguna vacación pagada.

(Repásese INDICADORES DE NUESTRA CLASE POLITICA)

A nivel nacional, destaco y recuerdo, entre otras “personalidades” las siguientes a las que acudí, vía e-mail:
- Rosa Díez (UPyD) en varias ocasiones, a través de la web oficial que esta formación posee.
- Cristina Chamorro (UPyD) representante por Madrid del departamento de Discapacidad y a la que inicialmente le escribí la carta, que luego tomé como modelo para esa aproximadamente veintena de políticos apáticos, ninguneantes, banales y, en definitiva insípidos ética, humana y deontológicamente hablando (15 de octubre de 2009: cristina.chamorro@upyd.es).

- Gaspar Llamazares: 22 de octubre de 2009: gaspar.llamazares@diputado.congreso.es

30 de octubre de 2009:
- Auxilio solicitado al PP en sí: atencion@pp.es
- Mª José Solana (PP): maria.jose.solana@diputada.congreso.es

- Carlos Floriano (PP): carlos.floriano@diputado.congreso.es

- Soraya Sáenz de Santamaría (PP): portavoz.popular@gpp.congreso.es

- Ana Mato (PP): ana.mato@diputada.congreso.es
- Mariano Rajoy (PP), a través de la web oficial de su partido: atencion@pp.es y hace poco de nuevo para que me explique por qué debo votar a su formación y no a otra, pero por lo que veo ni él mismo lo sabe, pues evidentemente tampoco contestó.
- Mª Dolores de Cospedal (PP)
Posteriormente a Cayo Lara (IU) y al partido en sí, a través la web de su formación política

Etc., etc., etc.

…………………..
Resultados:
Excepto Cristina Chamorro de UPyD, NADIE, a nivel nacional, se había dignado ni siquiera a contestarme en uno u otro sentido. El muy grave caso que denunciaba, como ya preveía en mí escrito a esta “clase social superior”, era considerado “porca miseria”:
“Aunque soy consciente del poco "atractivo" político que supone el caso que denuncio, dado que estoy en clara desventaja numérica respecto a un amplio colectivo, y por tanto, con pobres expectativas para ser tenido en cuenta, pues no nos olvidemos que aquí lo que cuenta es la contabilización de votos, la praxis pura y dura, quiero llamar a su puerta y tocar su sensibilidad, ya que se lo debo esencialmente a una niña que ha venido sufriendo constantes y sistemáticas muestras de aislamiento, exclusión, burlas, menosprecios, humillaciones, vejaciones y marginación negativa a nivel escolar, por parte de compañeros y con el consentimiento, ninguneo y mirar para otro lado de ciertos maestros y de todo un Sistema Educativo Extremeño, incluida la Consejera de Educación de Extremadura, Eva Mª Pérez…”.

(Consúltese CARTA ABIERTA A LA CLASE POLITICA)
En resumen, de la aproximadamente veintena de representantes de la “oposición” política local, autonómica extremeña y nacional a la que acudí, con reiteración a algunos de esos “representantes”, más los muchos cargos políticos en el poder (PSOE), el resultado fue el siguiente:
- Una comunicación telefónica de Eulalia Gervás del grupo UPyD y representante autonómica extremeña, que aunque me prometió estudiar el caso y ponerse en contacto conmigo en pocos días, finalmente no volvió a “asomar” ni telefónicamente como hicimos ni siquiera por e-mail.
- Varias comunicaciones, vía e-mail, con César Díez Solís, parlamentario de la Asamblea extremeña por el grupo PP, finalmente diluidas tras prometerme información y apoyo de su grupo, pero nunca dadas.

- Varias intercomunicaciones con Cristina Chamorro (UPyD) en distintas etapas, dado que en un principio quiso desmarcarse del asunto intentando que yo me apoyase en asociaciones y movimientos no políticos, pero luego vuelto a ser tomado por ella, tras mi insistencia a su partido y la puesta en escena de otros terceros que incidieron en el asunto. Finalmente, aunque su postura era positiva y cooperativa, no se atrevió por incomodidad a solicitar al actual Presidente Autonómico Extremeño, Fernández Vara, un informe detallado para solucionar la grave discriminación y abusos hacia una menor y su familia y, por ende, poder cotejar y depurar posibles responsabilidades político-administrativas.

En definitiva, desalentador, aunque previsible nulo apoyo e interés de esta clase política que nos ha tocado sufrir, que se desprestigia con sus argumentos zafios cuando publicita y propaga sus teóricas apologías ideológicas pero que, lejos de aunar esfuerzos, honradez y un código deontológico al que se debe; al parejo al que ofrece a la ciudadanía, se desmarca con sus interesadas amnesias ante promesas incumplidas y su apatía y mirar hacia el lado contrario al administrado, sobre todo cuando éste no representa una mayoría cuantitativamente rentable electoralmente. Luego se quejarán de su desprestigio ganado a base de la falta de paralelismo de lo que intentan proyectar y la realidad social de los ciudadanos, a los que teóricamente se deben; de favoritismos nada infrecuentes; de no pocas repetidas dádivas en forma de muy dudosas prebendas, prevaricaciones y otras menudeces fiscales…. y de demasiadas, frecuentes y diferentes varas de medir, dependiendo de si se es españolito medio o ciudadano influyente y conectado al señor de los anillos político.
Curiosamente, lo que no pudieron esos “valedores sociales” lo consiguió un amable y concienciado ciudadano anónimo de a pie, que interesado por mi asunto finalmente me consiguió una cita con el MIRLO BLANCO, aunque finalmente el Presidente no se había molestado en repasar siquiera el caso o pedir a sus asesores que tuviesen la debida “comprensión lectora” y que le contasen de qué iba la “movida”
(Consúltese ¿SABEN DE QUIÉN HABLO?).
Pero es lo que tenemos, un Presidente “pasmado”, voluntaria o involuntariamente; y una oposición amodorrada, faldera y trágala a veces, cuyo letargo produce inhibición testicular ante el panorama tan sombrío y espeluznante que ofrece nuestra actual y futura cercana realidad socio-política.
Por algo somos extremeños, y es que será verdad aquel dicho que dice, “¿tenemos lo que nos merecemos?”